Modelo del operativo de incendios forestales. Cantabria
Contexto
Los incendios forestales en Cantabria constituyen un problema sistémico de gran complejidad, con importantes repercusiones ambientales y sociales. La problemática se caracteriza por una elevada incidencia, con 3.830 siniestros registrados entre 2018 y 2022.
La raíz del problema es marcadamente social. La causa prevalente es la intencionalidad, superando el 96% de los casos. Históricamente, esta intencionalidad está ligada a prácticas ganaderas ancestrales (84,5% de los intencionados). El objetivo es revertir la evolución natural del pasto hacia formaciones de matorral/pastizal (Modelos 5 y 6, los más afectados) para regenerar el pasto. Esta práctica ilegal resulta en zonas de alta recurrencia en Montes de Utilidad Pública.
El riesgo se concentra temporalmente. El periodo entre diciembre y abril acumula el 79% de los incendios y más del 85% de la superficie quemada, coincidiendo con situaciones adversas de viento sur.
Ante esta realidad, y la experiencia de episodios extremos (casi 400 incendios en un mes y medio en 2015), es ineludible establecer un operativo de extinción de respuesta permanente, activo 24 horas al día, 365 días al año. Este enfoque holístico y la gestión integral del riesgo definen la estrategia actual, permite la combinación perfecta de la prevención con la extinción, siendo la verdadera esencia del operativo de incendios forestales.
La singularidad del Operativo de Lucha contra los Incendios Forestales de Cantabria radica en su enfoque holístico y la naturaleza de su justificación, derivada de una problemática marcada por la intencionalidad.
La justificación principal para la existencia y estructura del Operativo se basa en que la gran mayoría de los siniestros son intencionados, superando el 96% de los casos en el último decenio. Esta motivación está fuertemente ligada a prácticas ganaderas ancestrales (84,5% a 84,8% de los intencionados) para evitar la matorralización del terreno y regenerar pastos, afectando principalmente a los Montes de Utilidad Pública (M.U.P) y a los modelos de combustible tipo matorral/pastizal (Modelos 5 y 6). Además, el riesgo se concentra notablemente entre diciembre y abril, periodo que acumula el 79% de los incendios y más del 85% de la superficie quemada, a menudo bajo condiciones de viento sur (suradas).
La singularidad operativa del sistema cántabro, tras episodios de extrema gravedad y simultaneidad, es su constitución como un servicio público esencial, desempeñado por empleados públicos de la Dirección General de Montes y Biodiversidad de forma flexible y escalable en función del Riesgo de Incendios y la prevención y con la extinción de incendios.
Su justificación se concreta en un sistema de respuesta permanente (Nivel 1) activo 24 horas al día, 365 días al año. Este Nivel 1 se basa en la guardia de localización de cuadrillas forestales, Agentes del Medio Natural y Técnicos, listos para el pronto ataque o un ataque ampliado.
El Plan Estratégico (PEPLIF 2023-2027) adopta un enfoque holístico, con la participación social y la conciliación de intereses como ejes. El Operativo justifica su mejora continua invirtiendo cerca del 80% del presupuesto total planificado en el Objetivo General 3 (OGE3), destinado a la prevención y la generación de conocimiento. Esto incluye acciones clave de prevención como la consolidación de la gestión activa de los espacios forestales en los que se incluyen herramientas novedosas, entre otras como la realización de quemas prescritas como herramienta de gestión del riesgo y la planificación de paisajes menos vulnerables para reducir la propagación en situaciones de alta simultaneidad, donde la capacidad del operativo puede verse superada (más de 30 incendios activos).
El objetivo principal del Operativo de Lucha contra los Incendios Forestales de Cantabria, en el marco de su estrategia integral (PEPLIF 2023-2027), es reducir al mínimo los daños ecológicos, económicos y sociales producidos por los siniestros, disminuyendo el número de incendios y sus efectos sobre el medio. Su Misión es operar como un sistema eficiente, fundado en el conocimiento, la transparencia y las alianzas.
Para lograrlo, se establecen seis Objetivos Generales (OGE):
1. OGE1. Garantizar la participación social y de la administración local.
2. OGE2. Dotar a la Dirección General de la estructura administrativa, recursos materiales, humanos y formación necesarios para operar con eficacia.
3. OGE3 (Reducción de Impacto). Avanzar en el conocimiento del problema, planificar paisajes menos vulnerables y consolidar el sistema de quemas prescritas y acciones disuasorias.
4. OGE4. Garantizar la planificación y coordinación interadministrativa en situaciones de emergencia (Protección Civil).
5. OGE5. Dotar de un sistema protocolizado de restauración para las áreas afectadas.
6. OGE6. Desarrollar una estrategia eficiente de comunicación y sensibilización ciudadana.
Galería
Metodología
El Operativo de Lucha contra los Incendios Forestales de Cantabria es concebido como un servicio público esencial que garantiza una respuesta permanente las 24 horas del día, los 365 días del año. Su diseño general busca mitigar los daños mediante una lucha integral que incluye la prevención y la extinción.
Composición del Operativo
El Operativo está compuesto íntegramente por empleados públicos. La estructura de mando incluye:
Jefatura del Operativo. Titular de la Dirección General de Montes y Biodiversidad (DGMyB).
Jefe del Servicio de Montes. Funcionario responsable de la planificación de recursos humanos y materiales, la coordinación funcional y la propuesta de activación del Nivel 2.
Técnico de Guardia (TG). Funcionario (Ingeniero de Montes o Técnico Forestal) que comprueba diariamente los índices de riesgo, moviliza los medios y designa al Director de Extinción (DTE).
Director de Extinción (DTE). Funcionario (Ingeniero o Agente del Medio Natural) que dirige técnicamente el personal y los medios en el lugar del incendio.
Centro Autonómico de Mando. El "corazón de la gestión de incendios", atendida 24/7 por Escuchas de emisoras (personal laboral) y el Técnico de Guardia que distribuye los medios
Las unidades básicas en campo son las Cuadrillas Forestales (aproximadamente 36, con unos 250 bomberos forestales en total). Estas cuadrillas están formadas por el Encargado de Cuadrilla, que ejerce el mando directo en el primer ataque y los Operarios de Montes/Bomberos Forestales (incluyendo el conductor del vehículo autobomba).
Niveles de Alerta y Épocas de Peligro
El operativo se articula en dos niveles de alerta:
Nivel I (Guardia de localización). Se mantiene activo continuamente, garantizando la disponibilidad de una cuadrilla por sector (tres sectores) y un TAMN/AMN por comarca (13 comarcas) y un Técnico de Guardia. Deben estar disponibles para salir en menos de 15 minutos.
Nivel II (Servicios Especiales). Se activa por comarcas en situaciones de mayor gravedad. Los efectivos se dedican exclusivamente a la extinción en turnos de retén (mañana, tarde o noche), y hay al menos dos Agentes por comarca en servicio especial.
Las Épocas de Peligro se definen conforme al plan INFOCANT (Decreto 192/2023):
Para toda la Comunidad. Desde el 1 de febrero hasta el 30 de abril.
Para Liébana, Campoo y Los Valles. Desde el 1 de agosto hasta el 15 de octubre.
Cabe destacar que el periodo diciembre-abril es el de mayor incidencia, acumulando el 79% de los incendios.
Planificación de Acciones y Medidas Preventivas.
La planificación anual (PAIF) tiene como objetivo general reducir al mínimo los daños ecológicos, económicos y sociales. Se prioriza la prevención sobre la extinción, lo cual se materializa en diversas acciones planificadas:
Inversiones. Se planifican importantes inversiones, como 2.000.000 € para garantizar la flota de autobombas y vehículos, y fondos para la mejora de pistas forestales y la restauración de bosques.
Gestión del Combustible. Las acciones se centran en la modificación de los modelos de combustible más afectados (Modelos 5 y 6). Esto incluye incrementar los tratamientos selvícolas para reducir la intensidad calorífica y fomentar la consolidación del sistema de quemas prescritas.
Seguridad y Formación. Se planifican programas de formación continua y se garantiza la dotación y correcta utilización de Equipos de Protección Individual.
Interfaz Urbano-Forestal (IUF). Una medida preventiva clave es la obligatoriedad de elaborar e implementar Planes de Autoprotección de Incendios Forestales (PAIF) para edificaciones y núcleos aislados ubicados en zonas de influencia forestal (400 metros de suelo forestal de riesgo alto). Estos planes requieren mantener una faja perimetral de protección de treinta metros libre de vegetación seca alrededor de la propiedad.
El Operativo y su planificación buscan mejorar continuamente la eficacia de extinción, estableciendo como objetivo para 2025 mantener el porcentaje de conatos (incendios < 1 ha) por encima de la media de los últimos 10 años (27,6%).

Resultados
El modelo operativo de Cantabria, articulado mediante el Plan Estratégico de Prevención y Lucha contra los Incendios Forestales (PEPLIF) 2023-2027 y el Decreto 12/2011, arroja conclusiones significativas derivadas del análisis de datos recientes (2016-2022), las cuales guían la estrategia de gestión integral del riesgo.
Conclusiones de la Problemática y Eficacia Operacional
La principal conclusión es la naturaleza social y sistémica del problema. La causa de los siniestros es abrumadoramente intencionada, superando el 96% de los casos en el último decenio, y está ligada mayoritariamente a prácticas ganaderas para evitar la matorralización y regenerar pastos. Esta motivación da lugar a una alta recurrencia del fuego. Entre 2018 y 2021, solo el 78.8% de la superficie quemada lo fue una sola vez, evidenciando un ciclo dañino de "fuego-pacer-fuego" que impacta gravemente la calidad del suelo y la vegetación.
En términos de eficacia, el Operativo, que funciona 24 horas al día, 365 días al año, demuestra solvencia en la respuesta diaria. La experiencia indica que gestiona adecuadamente hasta 15 incendios activos. La efectividad del pronto ataque se refleja en el porcentaje de conatos (incendios de menos de 1 hectárea), que representa el 32,7% del total de siniestros en el periodo 2018-2022, superando el objetivo de control de mantenerse por encima de la media histórica del 27,6%.
No obstante, el análisis de simultaneidad es un punto crítico. En días con más de 30 incendios activos (situación que representa una pequeña fracción de los días, entre 1.2% y 2.7%), la capacidad del operativo puede verse superada, lo que resulta en la propagación libre de incendios o en la imposibilidad de despachar medios suficientes. En estas situaciones extremas, los incendios con más de 50 focos activos al día llegan a concentrar el 27.6% de la superficie promedio diaria afectada por incendio. Los incendios grandes (más de 100 ha), aunque son menos del 3% del total, suponen cerca del 40% de la superficie total afectada.
Conclusiones Estructurales y de Mejora
El diagnóstico de la primera fase del PEPLIF (2017-2022) concluyó una mejora sustancial en la dotación de personal técnico (Agentes del Medio Natural y Cuadrillas Forestales) y la renovación de la flota de vehículos y autobombas.
Sin embargo, persisten deficiencias organizativas que el nuevo PEPLIF 2023-2027 busca resolver (OGE2), entre otras completar la plantilla de técnicos del Servicio de Montes y mejorar su estructura para atender de forma más eficiente las demandas de la sociedad del S XXI. Las conclusiones apuntan a la necesidad ineludible de elaborar un nuevo Decreto (sustituyendo al 12/2011) para resolver carencias en la central de emisoras y la distribución territorial del personal de Nivel 1. También es crucial implementar un sistema integral de gestión de operaciones que centralice el control georreferenciado de incendios y el seguimiento de medios en tiempo real. Además, se destaca la importancia de completar y actualizar la red de puntos de agua para medios aéreos con el fin de incrementar su eficiencia.
El modelo concluye que debe pivotar estratégicamente hacia la prevención, destinando recursos a la investigación de causas y a la planificación de paisajes menos vulnerables que rompan la continuidad del combustible, especialmente los modelos 5 y 6 (matorral/pastizal) que concentran más del 87% de la superficie afectada.

Datos
| Tipo de entidad |
Autonómica
|
|---|---|
| Nombre entidad |
Dirección General de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático (DGMyB) de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.
|
| Nombre contacto |
Javier Espinosa Rubio de la Torre
|
|---|---|
| Puesto que desempeña |
Jefe del Servicio de Montes. DG de Montes y Biodiversidad. Cª de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación. Gobierno de Cantabria
|
| Teléfono |
942.20.75.93
|
|
dgmedionatural@cantabria.es
|
Compartir
Ultima actualización: 02/12/2025 16:17